Una
várice se define
como una vena dañada; con una pared débil, se vuelve flácida y retiene
sangre que no circula.
Las
venas tienen válvulas
unidireccionales que se abren y cierran para mantener la circulación de la
sangre hacia el corazón. Cuando la
vena
retiene la sangre o hace que fluya en sentido contrario, es cuando se presenta
una várice.
Su
causa se debe a distintos factores, como la obesidad, la falta de
ejercicio, el embarazo o por cuestiones hereditarias. La
probabilidad de desarrollar várices crece cuando una persona es de edad
avanzada o tiene un estilo de vida sedentario.